FAROLES JAPONESES
UN TOQUE ORIENTAL EN TU JARDÍN (2)
INTRODUCCIÓN
Los faroles fueron introducidos en el jardín desde los templos budistas, donde siguen siendo un elemento destacado.
Dentro de los faroles japoneses encontramos tres tipos básicos, comunes en el jardín japonés:
- Farol de tipo pedestal (tachi-gata)
- Farol de tipo clavado en el suelo (ikekomi-gata)
- Farol de tipo contemplar la nieve (yukimi-gata)
A continuación vamos a hablaros sobre los tres tipos de farol para que podáis elegir el más adecuado para vuestro jardín, terraza o patio y así aportar un aire oriental que lo diferencie de los demás.
FAROL DE TIPO PEDESTAL (tachi-gata)
Para este farol, vamos a hablar del farol Kasuga, el más popular entre éstos. Está tan asociado a este tipo que muchos los conocen como faroles Kasuga. El original procede del monte Kasuga en Nara.
Estos faroles constan de seis partes: pedestal, columna, plataforma central, fuego o caja luminosa, pantalla y orbe.
El farol Kasuga tiene un pedestal hexagonal, una plataforma central, una caja luminosa y una pantalla, la columna es redonda.
Solo los faroles de tipo pedestal se encuentran en tamaños de entre 1 y 10 metros de alto y con cuatro, seis u ocho lados.
A la hora de orientarlo, la "cara" del farol suele ser el lado abierto más grande de la caja luminosa y un lado de las piezas hexagonales. Los faroles modernos suelen fabricarse con una flecha en las superficies internas que muestra qué lado es el frontal del farol.
FAROL CLAVADO EN EL SUELO (ikekomi-gata)
Este tipo de farol no tiene pedestal y se entierra directamente en el suelo. Tal y como ocurre con el farol Kasuga, el farol Oribe está tan asociado con este estilo, que a menudo se utiliza como nombre genérico. Es uno de los pocos faroles que toman su nombre de una persona y no del lugar de su uso original. Farol algo más sencillo y pequeño que el tipo de pedestal, tiene la ventaja de ser fácil de ajustar en altura, enterrando más o menos la columna. Suele hallarse en forma cuadrada o cilíndrica y nunca se encuentra en tamaños grandes. Suele medir 1 m. o menos de altura.
A la hora de instalar este tipo de faroles, decidimos la orientación (la abertura más grande de la caja luminosa hacia delante) y cavamos un agujero de al menos 30 cm. de profundidad y más ancho que la columna.
Colocamos la columna en el agujero y forzamos varias piedras entre ésta y el agujero. Se pone temporalmente la plataforma central sobre la columna y comprobamos el nivel.
Rellenamos el agujero y con un palo movemos la tierra para que llegue a todos los espacios vacíos del agujero. Acabamos compactando bien el terreno para evitar que el farol se mueva.
Por último volvemos a colocar la plataforma central, la caja luminosa, la pantalla y el orbe igual que para el tipo de pedestal.
FAROL DE TIPO "CONTEMPLAR LA NIEVE" (yukimi-gata)
A pesar de su nombre, este farol se asocia con los estanques o las superficies de agua, si no hay agua el farol parece fuera de lugar.
Hay dos tipos básicos de este farol, de cuatro y tres patas. La principal característica de este farol es su gran pantalla redonda. La altura suele ser inferior a un metro aunque a veces, se ven faroles grandes.
Para colocar el farol debemos decidir la orientación y luego nivelar el suelo y compactarlo.
Para el de cuatro patas, basta con colocarlas de base y luego poner la caja luminosa, la pantalla y el orbe. La plataforma central suele fijarse a las patas, éstas deben ponerse de forma que dos de ellas se sitúen hacia delante. Si la pantalla es redonda, su orientación dará igual y si el farol es hexagonal, un lado debe situarse hacia delante.
El de tres patas es muy delicado, las patas son independientes y están conectadas por un bloque en el que se insertan, suele ser bastante difícil equilibrar las patas. Si están demasiado juntas, el farol resultará inestable y difícil de nivelar y, si se encuentran muy separadas, las patas se distanciarán más aún cuando se monten las pesadas partes superiores.
La orientación correcta consiste en colocar una pata directamente delante, además, deben enterrarse unos 10 cm. para impedir que el farol se vuelque.
Hoy en día podemos encontrar, a nivel comercial, faroles de estilo japonés similares a alguno de estos tres tipos, suelen ser de materiales que simulan la piedra, mucho más ligeros y por lo tanto, más fáciles de montar. Ésto hace más accesible este tipo de ornamento para nuestro jardín.
Esperamos que os haya gustado el post y os recordamos que la semana que viene dejaremos de publicar en el blog durante un mes, ya que nos vamos a Japón a coger ideas para futuros proyectos.
¡¡¡SALUDOS!!!